Aunque todavía no estemos en verano y luciendo piel allí donde vamos, puede que los granitos en la espalda te sigan molestando no sólo por una cuestión estética.
Debes saber que si tienes la piel grasa o llevas algún tatuaje en la espalda es más fácil que aparezcan pequeños granitos. En Modaellas.com os contamos trucos para conseguir quitar esos molestos granitos de la espalda, no hace falta gastar mucho solo que seas constante.
¿Por qué salen granitos en la espalda?
En primer lugar, debemos descartar la adolescencia. Ya sabemos que en esta época, los chicos y chicas comienzan a sufrir varios cambios en su cuerpo y uno de ellos es el acné, hasta el punto en que puede llegar a la espalda. Todo depende de cómo se alimenta, se viste y dónde se encuentra. Es un reajuste del sistema linfático, para su nueva vida de adulto, así que si ocurre en la adolescencia, espera que pase. Simplemente trata de no tocarlos, para evitar infecciones.
Estos granitos, barros o pequeñas espinillas salen porque los poros de la piel se cubre con impurezas o suciedad que mezclada con la grasa de la piel o sebo, hace que salga el granito. Piensa que por el simple hecho de ponernos ropa o si por ejemplo tenemos alergia a nuestra ropa interior, puede que nos aparezcan esos molestos granitos que no se ven pero que no nos gustan nada.
Por otro lado, y a pesar de que te laves a diario la piel se ensucia de la polución y otras condiciones atmosféricas, muchas veces tocarse un granito hace que se pueda infectar y salgan otros granitos en la zona cercana. Tu pelo puede favorecer también la aparición de granitos en las zonas de piel donde roza.
En la frente, nariz y barbilla es donde más suelen salir granitos ya que hay glándulas sebáceas, además cada persona según su tipo de piel puede tener mayor facilidad para tener granitos en distintas zonas de la piel.
La piel de la espalda al no tener fácil acceso y no verla con detalle puede presentar granitos que se hacen difíciles de quitar. Todo tiene arreglo, te contamos trucos que funcionan para los granitos de la espalda.
Otras causas de que aparezcan los granitos en la espalda sería la alimentación que llevamos, porque si te alimentas a base de hamburguesa y chocolate, puede que tu sistema no reacciones bien a esa invasión de grasas y azúcares. Los granitos en la espalda, sería una señal de que algo no va bien en tu cuerpo y tu sistema inmunológico trata de enviarte señales de esta manera.
Y por último, otro agente encargado de hacer que salgan granitos en la espalda es el estrés. Un peligroso ser que hace que manifestemos a nivel físico, todos los problemas que se nos pasan por la cabeza. En este caso, puede expresarse a través de los granitos en la espalda.
Soluciones para quitar los granitos de la espalda
Para acabar con los granitos de la espalda, necesitamos atacar a la base del problema y es la piel de la espalda, que no reacciona bien o está maltratada con el paso de los años. Necesitamos partir de ella, para que no vuelvan a salir.
Exfoliación
Exfoliación una vez a la semana. Lo bueno es que te sirve no solo para la espalda, también para el resto del cuerpo y cara, por minutos parecerás “el yeti” pero el resultado vale la pena tu piel parecerá seda.
Para esto necesitas:
- Dos puñaditos de azúcar de la que tengas en casa
- Un puñadito de salvado de avena
- Un poco de jabón neutro o jabón de bebé, vale el champú de bebé también.
- Un chorrito de agua.
Se mezcla en un recipiente los ingredientes y se añade agua hasta crear una pasta. Luego esta pasta te la extiendes por la espalda con las manos, como puedas y frotas con el cepillo con mango.
Con un poco de maña se logra y tendrás tu espalda cubierta de esta pasta. Frotar bien. Dejar reposar al menos cinco minutos. La avena tiene propia des suavizantes y calmantes de la piel, y gracias a los gránulos de azúcar podremos eliminar células muertas acumuladas en la piel.
A continuación enjuagar en la ducha con agua tibia y luego fría, el agua fría ayuda a cerrar el poro y es refrescante para la piel. Si te acostumbras a usar agua tibia en lugar de muy caliente mejor para la piel.
Limpieza
Para ello, sólo necesitamos agua jabonosa y una esponja suave. Puede que de buenas a primeras, crees que es mejor un guante de crin o una esponja más firme, pero todo lo contrario.
La piel de la espalda, al ser una parte, tan olvidad, por así decirlo, tiene una composición mucho más frágil. Abrasarla a base de esponjas, manoplas o guantes, sólo hará que se inflame el tejido, se abran pequeñas heridas y se exponga a microbios que puede encontrarse en los perfumes, la ropa, las sábanas, las toallas, nuestro pelo o ¡nuestro sudor!
Eso introduciría más suciedad y agravaría el problema de los granitos en la espalda. Agua jabonosa recorriendo por la espalda, después de una buena exfoliación, es perfecta para limpiar y desinfectar las heridas de la espalda.
Te recomendamos que utilices un gel de baño neutro, hipoalergénico que no provoque reacciones negativas sobre la piel.
Hidratación
¿Hidratación? Sí hidratación. Aunque creas que tu espalda lo que menos necesita es algún agente hidratante, recuerda que ha estado expuesto a una dura exfoliación, a un lavado y ahora necesita recuperarse. Para ello, necesitamos un buen hidratante, que se adecúe a las características de tu piel.
En este caso, tu piel, en la espalda suele ser grasa y no hay nada mejor que una gel frío con base de Aloe Vera para combatir esa grasa, a la par que restaura las capas de la piel que han sido agredidas.
Cuando vayas a comprar el gel, pide un gel puro de Aloe Vera, el cual debe ser de consistencia viscosa y color blanquecino. Lo podrás encontrar en farmacias o tiendas naturistas. El que te encuentras en el supermercado, apenas tiene Aloe Vera y creen que con una pegatina y el color verde, lo consiguen.
Si resulta que tienes muchas heridas a causa de los granitos de la espalda, procura conseguir aloe vera fresca. Tiene efecto astringente y aplicándola directamente sobre las marcas, se secarán y comenzarán a cicatrizarse a gran velocidad. Puede que reseque, un poco, pero hasta que no se cure la espalda, es mejor, mantenerlo así.
El aloe vera es un tesoro de la naturaleza tiene propiedades antisépticas y bactericidas. Puedes usar la planta natural y extraer el gel o más cómodo comprarte un gel de aloe (no crema, mejor gel que tenga un 90% o más de aloe vera). El gel se absorbe muy bien y no es graso, extender el gel por la espalda, notarás una sensación muy agradable de frescor. Este gel de aloe hay que aplicárselo a diario en las zonas donde te salgan granitos en lugar de crema hidratante. No te preocupes que, tu piel no se resecará. Ver también Propiedades de la sábila para la piel y el cabello
Soluciones para quitar los granitos de la espalda: visita a tu médico
Es una forma muy eficaz de prevenir y evitar que se agrave.
No dudes en visitar a un dermatólogo que pueda estudiar tu caso en profundidad. Porque no sabemos si estás expuesto a ciertos agentes que pueden empeorar tu espalda, ni conocemos tu estilo de vida.
Un dermatólogo, que es un especialista de la piel, siempre podrá descubrir qué le ocurre y estudiar su situación para revertirla y contar con alguna ayuda extra, como un medicamento, para que esos molestos granitos, no vuelvan a aparecer.
Ahora que ya has visto las causas de los granos en la espalda y las maneras en las que puedes eliminarlos así como prevenirlos, te animamos a que los pruebes. De este modo, seguro que vas a tener una espalda mucho más bonita y no te sentirás mal cuando no puedas llevar vestidos abiertos por este motivo.
Prevención de granitos en la espalda: trucos
Más vale prevenir que curar, por eso, mantendremos una rutina, para mantener la espalda limpia y en buen estado para que se recupere y cicatricen los granitos de la espalda.
- No la limpies a diario porque la piel tiene una película protectora que si la retiras cada día en la ducha, con algo agresivo, acabará saliéndote un sarpullido y además, podría empeorar la espalda.
- Lo mejor que puedes hacer es exfoliarte la espalda una vez a la semana y lavarla tres veces a la semana, para que se reestructure el equilibrio de la piel de la espalda. Pero si por ejemplo, vas al gimnasio y sudas, necesitarás una ducha. No te frotes la espalda, sólo deja que el agua con jabón, caiga sobre la piel.
- Que las duchas no sean de más de cinco minutos, porque la humedad para la piel es mala, cuando tienes ese problema, ya que se abren los poros y se expone. Procura no ducharte con agua muy caliente y aunque te duela, termina con una ducha fría.
- Si vas a estar expuesto al sol, protector pantalla total o de más de 50 de protección.
- Que la ropa que lleves puesta no sea muy apretada, para dejar que la sangre circule con normalidad.
Tratamientos para el acné en la espalda
Hasta ahora hemos visto algunos remedios caseros que te van a ayudar a eliminar el acné y los granitos en la espalda. Sin embargo, si tu problema es mayor es probable que debas recurrir a un tratamiento a medio o largo plazo. Lo mejor es que acudas a un médico o dermatólogo especialista que te oriente y te ayude con lo que realmente necesitas. Aún así, nosotros vamos a contarte cuáles son los principales tratamientos contra el acné para que te vayas familiarizando con ellos.
- Antibióticos orales: Esta es la solución más común, o al menos la primera que se suele probar. Es poco intrusiva y en el peor de los casos no funcionará, pero no causará mayores problemas. Se suelen recetar los siguientes componentes: tetraciclina, eritromicina, doxiciclina, trimetoprima, minociclina y amoxicilina.
- Láser: Desde hace unos años también existe esta posibilidad para combatir el acné en cualquier parte del cuerpo. Se utiliza lo que se conoce como terapia fotodinámica.
- Antibióticos tópicos: La clindamicina, la eritromicina o la dapsona se pueden recetar para aplicarlos de manera tópica. Estas cremas se suelen aplicar una o dos veces al día durante un periodo determinado de tiempo. Son bastante eficaces y dan buenos resultados a medio y largo plazo.
- Gel con ácido retinoico: Este tipo de gel no es antibiótico como los anteriores. Sin embargo, sus componentes activos son ideales para combatir el acné. Aplicado en la espalda con un buen masaje y dejándolo actuar mostrará sus resultados en muy poco tiempo.
- Dermoabrasión: Además de la técnica de láser que hemos nombrado antes hay otro tipo de acciones que se pueden llevar a cabo sobre la piel. Es el caso de la dermoabrasión o incluso de la quimioabrasión.
Como ves hay multitud de tratamientos diferentes con los que tratar el acné. Sin embargo, como ya hemos comentado antes, lo mejor es que sea un médico especializado en el tema quien vea la profundidad del problema en la piel. Así sabrá qué tratamiento administrar y podrá valorar la evolución.
Lo normal es que se empiece con un tratamiento en gel no antibiótico y se vaya subiendo en base a sus efectos. Después llega el omento del antibiótico (oral o tópico) y si no funciona se llevará a caboun tratamiento más invasivo. Aún así, hay casos claros en los que hay que empezar por un tratamiento fuerte. Por eso insistimos en la necesidad de acudir a un médico si el acné no se cura con los remedios caseros antes citados.
A continuación puedes seguir leyendo otros artículos relacionados con el acné y los granitos en diferentes partes del cuerpo. Seguro que te son muy útiles, ¡no te los pierdas!